
Jorge Gesell en su ranchito de la Sierra del Boquerón (pinche para ampliar la foto)
Cuando las primeras señales de oro fueron descubiertas en la Sierra del Boquerón, en 1879, una pequeña fiebre del oro comenzó en Tierra del Fuego. Tras unas pocas décadas, las explotaciones mecanizadas se rindieron a la falta de rentabilidad y dejaron el área a los buscadores independientes. Todavía hoy quedan cinco solitarios que, cada uno por su cuenta, extraen oro de forma artesanal en diferentes lugares de la Sierra del Boquerón.
En el presente número de la revista Altaïr (Septiembre-Octubre de 2009) aparece publicado mi reportaje sobre Jorge Gesell, uno de estos últimos buscadores. Son seis páginas en cuyo texto explico como vive Jorge y la historia de la minería aurífera en Tierra del Fuego.
El número está dedicado a la Antártida y Tierra del Fuego y contiene muchos otros reportajes.
Me encanta esa revista...
ResponderEliminarMe gustará leer esos textos del reportaje ¿son también tuyos? Compraré la revista el lunes.
ResponderEliminarYo viví unos años en la calle Buscarons y jamás conseguí que mi madre no la llamara calle del Boquerón como la sierra de Tierra del Fuego.
Ars natura,
ResponderEliminarA mi tb me gusta mucho Altaïr. Tiene reportajes muy buenos. Como dijo frikosal un día: "Parece mentira que sea de aquí".
Nomesploraria,
Sí, el texto también es mio. Es un honor que compre la revista, muchas gracias. Publicaría el texto aquí, pero creo que no les haría mucha gracia a los de Altaïr, je, je.
Pues yo no pienso esperar al lunes, hoy mismo voy al quiosco.
ResponderEliminarMe encanta ese ranchito de Jorge Gesell con su tejado de champa.
ResponderEliminarExcelente trabajo Jordi.
Felicidades !
ResponderEliminarEs estupenda esta foto.
Treehugger,
ResponderEliminarMuchas gracias. Cuando estuve allí me fijé en cómo estaba hecho el ranchito. Tal vez me haga yo uno un día, je, je.
Gracias friko!
ResponderEliminarMmm... Grrrrr...
ResponderEliminarParece que sólo podré ver la foto, que por demás está muy buena!
Felicitaciones!
Pinta interesante el reportaje. Nos acercaremos al quiosco para poder comentar. Saludos.
ResponderEliminarMuchas felicidades. Tu trabajo demuestra que los temas están ahí. Sólo hay que ir a buscarlos, con talento y con riesgo (de que no te los publiquen) Felicitats
ResponderEliminarJorge,
ResponderEliminarPor suerte casi todo tiene solución.
Igniszz,
Muchas gracias, espero que te guste.
Tino,
Gracias. El riesgo que no los publiquen es muy cierto. Ya me ha pasado más de una vez. Pero mientras los temas no se hagan viejos, hay que continuar intentando publicarlos.
Vaya, llego tarde, pero bien asesorado por el Dr. Frikosal. Con tu permiso, me iré pasando a disfrutar, claro.
ResponderEliminarUn saludo!
Claro que sí, Martín. Bienvenido y gracias por tu visita.
ResponderEliminarHe visto tu reportaje sobre los buscadores de oro en Tierra de Fuego, en tu página web, y me ha gustado mucho. En cierto modo me da pena que sean los últimos buscadores, y que se pierda este duro, pero interesante, trabajo en esa zona.
ResponderEliminarUn saludo!
Andres,
ResponderEliminarMuchas gracias. A mi tb me da pena el fin de algunos modos de vida. El mundo se está uniformizando demasiado.
Hola, Jordi.
ResponderEliminarMe llamo Pedro Santos, soy de Brasil.
Por acá no se llegan muchas histórias de la Patagonia, solamente los viejos temas - la naturaleza, el frio, montañas, etc.
Muy bueno sus fotos, pero todavía no pude leer el texto una vez que no pude encontrar el magazine.
A mí me gustaria saber quales más conflitos sociales existen en la Patagonia.
Podríamos nos hablar por mail?
Mi mais es
pikneo@gmail.com
Saludos cordiales,
Pedro.
Gracias Pedro, tampoco yo se mucho de conflictos sociales en la Patagonia. Únicamente me han contado sobre las grandes estancias propiedad de millonarios de países ricos que emplean a peones mal pagados.
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