En fotografía de viajes hay vida más allá de las playas con palmeras y las imágenes con colores ultrasaturados. O por lo menos eso creo yo. De vez en cuando encuentro lugares cuya esencia se desvela poco a poco. Sitios de una belleza más modesta, pero también menos chillona.
Tengo que admitir que me gustan más estos últimos. Quizás por ser menos visitados y por la calma que en ellos se respira. En esas ocasiones me encanta salir a pasear al final de la tarde, para vagar sin rumbo tratando de captar con la cámara los pequeños detalles y escenas que se van encontrando. Hasta que llega la noche.
Recientemente he regresado de Colombia. Fui a parar allí justo después de una etapa muy estresante en Venezuela. No podría haber sido un mejor momento.
En los Andes de ese país existen unos pueblos, algunos conocidos y otros no, que ofrecen una tranquilidad y una calma difícil de encontrar en estos tiempos. Las fotos que les muestro hoy son algunas de las que hice aquellos días. He colgado algunas más en una galería de mi web. Me gustaría mucho que les echaran un vistazo y me dieran su opinión. Recuerden que si la fotografía es difícil es porque debe transmitir emociones a aquellas personas que no se encontraban allí.
Tengo que admitir que me gustan más estos últimos. Quizás por ser menos visitados y por la calma que en ellos se respira. En esas ocasiones me encanta salir a pasear al final de la tarde, para vagar sin rumbo tratando de captar con la cámara los pequeños detalles y escenas que se van encontrando. Hasta que llega la noche.
Recientemente he regresado de Colombia. Fui a parar allí justo después de una etapa muy estresante en Venezuela. No podría haber sido un mejor momento.
En los Andes de ese país existen unos pueblos, algunos conocidos y otros no, que ofrecen una tranquilidad y una calma difícil de encontrar en estos tiempos. Las fotos que les muestro hoy son algunas de las que hice aquellos días. He colgado algunas más en una galería de mi web. Me gustaría mucho que les echaran un vistazo y me dieran su opinión. Recuerden que si la fotografía es difícil es porque debe transmitir emociones a aquellas personas que no se encontraban allí.
18 comentarios:
Dan la impresión de ser sitios donde nunca pasa nada, la llegada del cartero o de un forastero como usted es un acontecimiento, donde los días son iguales unos a otros por los siglos de los siglos. Para usted debe haber sido un remanso tras los acontecimientos estresantes de los que venía (¿fueron esos días en los que nadie sabía nada de usted y temimos por su vida?)
Las calles empinadas con las casas de balcones corridos de madera me han recordado a los pueblos de extremadura y el patio florido con el pozo me ha hecho pensar en la casa de El amor en los tiempos del cólera.
La señora del vestido blanco dentro de una puerta azul parece irreal, como un trampantojo.
Desanchá, muchas grácias por entrar en la galeria. Tienes razón, la señora del vestido es un trampantojo.
Y sí, los acontecimientos estresantes, de los que tal vez un día hable, fueron aquellos días en que desaparecí.
SantoSeñor!!!
...mis calles alfombradas de gres.
Las ganas de pisar.
...Y no quiero seguir, porque en el fondo estoy un poco furiosa.
Este medio, quiero que me emocione,... pero no, que me exija respirar.
B.N.C.J.
Beso.
Por cierto,...
Buenas Noches Corazón Jordi.
No conozco Colombia, pero al ver tus fotos me recuerdan a la arquitectura de los pueblecitos de Minas Gerais. Por cierto, no había visto tu trabajo de las Azores: me parece magnífico. La diferencia que veo entre los dos temas es que en el de Portugal, al haber más cercanía (fiestas, etc...) aprendo cosas de la gente y en el de Colombia de la arquitectura y paisaje.
MartinAngelair,
espero que aparte de hacerle respirar también le haya emocionado algo.
Rafa,
muchas gracias por la revisión.
Acabo de ver Minas Gerais en tu web y es alucinante. No tenia ni idea que fuera tan bonito. Las iglesias son iguales que las de Portugal. Y la atmósfera recuerda a estos pueblos de Colombia. Me parece que voy a pensar en Brasil para un futuro espero que no muy lejano.
Te pido sinceramente disculpas.
...y es así.
Me han emocionado,...y me he atragantado con el aire.
B.N.C.J.
MartinAngelair, no tiene por qué disculparse. :-)
Piensa en Brasil, Jordi.
Minas Gerais es un estado enorme (del tamaño de España) y yo sólo recorrí las principales ciudades bastante rápido, pero hay una zona de cascadas, las minas y otras partes que me quedaron pendiente. El viaje además era un fam-trip y no pude sacarle el provecho que me hubiera gustado. Es un país para pasar tiempo y trabajarlo con calma.
Sí Rafa, las dimensiones americanas hacen imposible el poder conocer los países con profundidad. Hay que conformarse con pequeñas zonas.
Calma, paz y tranquilidad es lo que respiran tus fotos. Una idea alejada del estereotipo que se suele tener de Colombia.
Igniszz, es que Colombia ha cambiado muchísimo en los últimos años. Hay bastantes lugares, como estos pueblos, que son tanto o más seguros que los pueblos de, por ejemplo, los Pirineos.
Aprovecho para recomendar el país a quien le apetezca un viaje a un lugar sin muchos turistas.
Ahora no se me vayan a la selva, que las guerrilas siguen existiendo.
Digamos que viajar a Colombia es muy seguro si uno se entera antes de la situación y de dónde puede ir tranquilo.
Enhorabuena por las fotos tanto del actual reportaje como el de los Amish en la Selva. Me gusta tu mirada a la aparente ausencia de acción, ¿será tal vez debido a la observación de las estrellas? Un saludo.
Estupenda entrada, dan ganas de irse a pasear por esas calles.
David, probablemente la observación de las estrellas ayude a fijarse en detalles. No obstante, en este caso simplemente me encontraba muy bien entre tanta calma. Venia de una situación estresante unos días antes.
Frikosal, por supuesto Vd. piensa que nunca va a ir a Colombia. Y como siempre yo pienso que sí que irá.
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