Hoy enseñamos una situación totalmente anodina en la que nosotros aportamos nuestra visión irónica. Tener los ojos bien abiertos, y sobretodo la mente dispuesta a interpretar una situación de forma humorística a la más mínima posibilidad, son la clave para no pasar por el lado de esta estatua de París sin hacerle ni caso.
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4 comentarios:
No lo pillo.
Anónimo, supongo que es como cuando se explica un chiste... tal vez si pinchas en la foto para verla más grande... Simplemente es la expresión de la cara medio cubierta de nieve, con los ojos medio cerrados. Algo secundario sería el pedazo de papel, que a primera vista parece un espejo en el que la estatua se mira.
Por la expresión de la cara, con los labios apretados, o se está haciendo pis, o se está aguantando la risa. O le pica un huevo y no es el momento de rascarse.
Desanchá, no sabría decirte con que opción me quedo.
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