martes, 25 de septiembre de 2012

El salto del pastor canario. Viaje a Tenerife, Islas Canarias.


En estos días que he estado viajando por Tenerife, una de las cosas que más me ha gustado es presenciar el famoso salto del pastor. No es que fuera la primera vez que lo veía -ya lo había presenciado en La Gomera- sino sobretodo por la espectacularidad de la demostración que nos ofreció Damián Acosta.

Seguramente ya saben que el salto del pastor canario -también llamado brinco-, es una forma tradicional de desplazarse por terrenos escarpados ayudándose de una pértiga de madera. La lanza -también llamada garrote, astia, asta o lata- llega a medir hasta cuatro metros y lleva una punta metálica llamada regatón o puya. Tradicionalmente se utilizaba madera de pino canario, pero por motivos de conservación en la actualidad se usa madera de Finlandia.

Más que ponerse a discutir de qué isla es originario -en cada isla que he ido me han insistido en que eran ellos los pioneros-, encuentro más interesante hablarles de una pequeña diferencia que existe entre islas: La longitud de la lanza. Efectivamente, en las islas más escarpadas -como la Palma o la misma Tenerife-, las lanzas miden unos cuatro metros; mientras que en las de menos relieve -como Lanzarote y Fuerteventura-, estas miden tan solo dos metros y medio.



He encontrado esta referencia del siglo XVI donde el azoriano Gaspar Frutuoso ofrece uno de los primeros relatos de esta tradición indígena:

"Deitam-se com uma lança levada ao comprido do corpo do homem, terçada de maneira que põem um terço primeiro na terra ou pedra, onde dão com um ferrão de aço, que a lança traz de um palmo de comprido com seu calço, sem poder fugir do lugar donde dá; e, ainda que seja três lanças de alto, se lançam abaixo e se vêm a pôr no chão com tanta facilidade que parecem aves." 
Saudades da Terra (Livro I Capítulo XIV)

La lanza sirve tanto para subir como para bajar, e incluso para alargar un salto horizontal para salvar un obstáculo.

Damián saltó desde una altura de 4 metros aproximadamente, pero afirma que hay algunos "bestias" que han llegado a saltar 8 o 9 metros sin romperse la crisma (ahí está el mérito).




10 comentarios:

Oddiseis dijo...

Siempre que he visto a pastores canarios desplazándose de esta singular manera he tenido la extraña sensación de contemplar una escena onírica. Supongo que tiene que ver con la aparente ingravidez que les otorga. Como los pasos/saltos de Angstrom y Aldrin, o los brincos de los lémures de Madagascar.

Qué buen viaje el tuyo ;)

Pere Soler dijo...

Y lo mejor en estos tiempos de crisis, no consumen combustible!!!

Curioso, curioso...

Salut!!

MartinAngelair dijo...

Un viaje muy vivido Jordi,


...espero que tú también hayas probado el salto del pastor canario.



Esos 'bestias' que nombra Damián Acosta, son 'olímpicos'.




...La lata del brinco...




Una de las bellezas motivadas por la orografía canaria, y el 'ser' de sus gentes.




(Y qué buena aportación el fragmento de Saudades da Terra)




B.

Jordi Busqué dijo...

Oddiseis, por eso Frutuoso les compara con las aves.

Jordi Busqué dijo...

Pere, sí, je, je, todo acabaremos yendo a los sitios de esa manera.

Jordi Busqué dijo...

MartinAngelair, lo probé en La Gomera, pero fueron saltitos más bien.
Magnífico título Saudades da Terra.

Marc dijo...

Ríete tu de Londres 2012...

Jordi Busqué dijo...

Marc, no estaría mal hacerlo olimpico, no.

Anónimo dijo...

Eseeee Damiii, de tu prima Haridian que te quiere(L)

Anónimo dijo...

Ese Damiii, de tu primo Romen Adan que te quiere mas(L)